La Vida : un milagro divino

"Alégrate de la vida porque ella te da la oportunidad de amar, de trabajar, de jugar y de mirar a las estrellas"

Henry Van Dyke

(Escritor estadounidense)

La vida es maravillosa, sólo hay que aprender a disfrutarla y aprovechar agradecidamente todo lo que nos regala.

El vivir ya es sentirse feliz y por lo mismo la felicidad nos libera de todas las ansiedades. Nuestro pensamiento va superándose progresivamente, va avanzando paulatinamente hasta conquistar la ansiada pasividad de nuestra alma y la mansedumbre de nuestra inquieta mente.

En general la vida es un enigma, es muchas veces totalmente ilógica a nuestra manera humana de pensar, porque va y viene, porque siempre está en movimiento y porque nos traslada caprichosamente a un sin número de lugares y de situaciones que muchas veces no comprendemos; que desconocemos.

En reiteradas ocasiones la vida misma nos descoloca.
Los días se nos vienen grises y por lo mismo nuestra alma y nuestra mente ,muchas veces, no son capaces de enfrentar estos cambios tan repentinos y se nublan, convirtiéndose en objetos inertes, no dejándonos encontrar el sol.

Pero, no podemos vivir así, nuestro subconsciente nos reclama y por lo mismo para poder sentirnos bien, debemos de impregnarnos de infinitas paciencias, para comprenderla y para racionalizar que la vida no es pareja , que es compleja, insospechada y que sus procesos nunca son uniformes, sino que a veces se destilan por las más subterráneas corrientes.

La capacidad de poder volver lo negativo en positivo, está muchas veces en nuestras manos, ya que somos los forjadores de nuestros destinos en definitiva y todo lo que vayamos plantando a través de esta entramada telaraña llamada vida, lo cosecharemos en un futuro, de la mejor manera, siempre y cuando todo lo que hayamos sembrado en buena tierra ,haya sido con buenas semillas, si no nuestra cosecha será mala y no dará los frutos esperados.

Necesitamos mejorar nuestros horizontes, aunque hay veces que nos encontramos con gente que no nos desea lo mejor, que están pendientes de nuestra vida, para que al menor traspiés, disfruten de nuestra caída.

Pero no importa, debemos seguir, debemos ignorarlos, debemos de rodearnos de gente que sea sincera y que de verdad nos desee lo mejor. Gente que sea fiel, honesta, luchadora, verdadera, que podamos sentir que en ellas podemos confiar desde adentro , que podemos aprender de ella, que en definitiva nos demuestren que sin ningún interés propio, simplemente nos quieren por ser como somos.

Es difícil, lo sé, pero la hay. Hay veces en que no las vemos pero están ahí, sólo falta que salgamos un poco de nuestro ensimismamiento, para poder disfrutar de ellas y de todo lo bello que nos regala cada día la vida.

Somos alquimistas de nuestros destinos y eso es fundamental.

Nadie es perfecto y por lo mismo somos inherentes a comportarnos de maneras insospechadas en situaciones límite, de maneras que no comprendemos , que muchas veces juzgamos porque distan de nuestras propias maneras, porque se salen de nuestra escala de valores. Es así, no cabe duda, es la compleja naturaleza humana... entonces, ¿por qué no, enseñarnos un poquito, haciendo un pequeño esfuerzo?

Hay otro punto importante referido a estar constantemente soñando, pero soñando imposibles; construyendo castillos con bases de arena. Esa es una mentira a nuestro buen pensamiento ,porque nos crea falsas esperanzas; ilusiones utópicas, nada congruente, produciéndonos muchas veces frustración por no poder alcanzarlos, ya que solamente salieron de deseos íntimos sin bases sólidas, es decir, más que sueños; ensueños.

He aprendido a que si voy a soñar despierta, debo tener presente que mis sueños deben ser justificados, con metas reales, con personas de carne y hueso, con la voluntad que le aporta mi propia mente , mi propio esfuerzo, empezando en la tierra y después elevándose, con bases reales y con la certera esperanza de que si, son alcanzables, pero si no resultan, no fue porque no se intentó, fue solamente porque así tenía que suceder.
En ningún caso debemos de dejar de soñar, sólo tener presente que no debemos darle veracidad a la mentira y a la mentira verdad.

Por todo esto ,tenemos que valorar y entender que vivir es un milagro, un regalo venido del Cielo y hemos tenido el privilegio de haber sido elegidos para vivirla en esta tierra y de poder disfrutarla.

En este hermoso jardín llamado vida, cada uno tiene su pedazo de tierra, en donde cultivaremos y cosecharemos todas nuestras actitudes y vivencias, pero las buenas, las malas, a la basura, y no olvidarnos siempre de regarlo y abonarlo ,para que los "pájaros" no vengan llevándose las semillas ,que cada día plantaremos.

Somos los agricultores, los dueños , los escultores de nuestra vida ,que lentamente va tomando la forma que hemos decidido darle.

Hacernos feliz y hacer felices a los que nos rodean ,es la más noble tarea y la más difícil, es verdad, pero si no lo intentamos, seguiremos en la oscuridad absoluta, provocando que todos los días vuelvan a ser grises, con noches eternas, y mañanas llenas de niebla.

Lo importante es darse con amor y con mucha fe, para disfrutar de nuestra existencia, a pesar de todos los problemas que van surgiendo.
Entendernos, comprendernos y ayudarnos con la mejor disposición unos a otros y con los seres que amamos ,que son parte muy importante , de nuestro corazón, para que así cuando veamos que los letargos del tiempo senil se acerquen, podamos decir con alegría y eterna paz, que todo el esfuerzo valió la pena.

Que al volver nuestras miradas a las calles recorridas, veamos las huellas de bien que fuimos dejando a nuestro paso y que son únicas como nuestras vidas.

La Vida es una guerrera encantadora y turbulenta a la vez, mas no podemos negar , la gracia de vivirla y lo mucho que nos ha dado.

...gracias a la vida que me ha dado tanto...

Violeta Parra

(Compositora y folclorista chilena).

Agualuna